Otro gazapo de Bush: "Mandela está muerto porque Sadam mató a todos los Mandelas"
- Nelson Mandela sigue vivo, pese a un embarazoso comentario del presidente de Estados Unidos.
- El director ejecutivo de la Fundación Nelson Mandela ha tenido que tranquilizar a la población.
- Protestas contra sus últimas meteduras de pata .
Nelson Mandela sigue vivo, pese a un embarazoso comentario del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que aludió a la muerte del ex líder sudafricano en un intento por explicar la violencia sectaria en Irak.
"Todo lo que podemos hacer es tranquilizar a la gente, especialmente a los sudafricanos, de que el presidente Mandela está vivo", dijo Achmat Dangor, director ejecutivo de la Fundación Nelson Mandela, después de que las palabras de Bush tuvieran amplia difusión en todo el mundo.
Escuché a alguien decir '¿Dónde está Mandela?' Bueno, Mandela está muerto porque...
"Escuché a alguien decir '¿Dónde está Mandela?' Bueno, Mandela está muerto porque Sadam Husein mató a todos los Mandelas", dijo Bush - quien tiene una reputación de gazapos verbales - en una conferencia de prensa celebrada el jueves en Washington.
Encarcelado durante 27 años por luchar contra la minoría blanca en el poder, Mandela se convirtió en 1994 en el primer presidente de raza negra de Sudáfrica.
Antes ganó el Premio Nobel de la Paz por lograr la armonía racial y guiar a la nación pacíficamente en la era post apartheid.
Las referencias a la muerte de Mandela, quien tiene 89 años y un estado de salud delicado, son consideradas como poco sensibles en Sudáfrica.
Por otro lado, el presidente de EEUU ha dado en Australia argumentos a los que critican sus meteduras de pata. En un discurso ante líderes empresariales en la APEC, agradeció al primer ministro australiano que sea "un anfitrión tan excelente de la cumbre de la OPEP", la Organización de Países Exportadores de Petróleo. El desliz provocó las carcajadas de la audiencia.
Pero la cosa no acabó ahí. Minutos después, Bush recordó la visita de Howard a las tropas "austríacas" en Irak, cuando a lo que en realidad se refería era a los más de 1.500 soldados australianos destacados en el país árabe.
Y como lo que mal empieza, mal acaba, se equivocó de salida tras pronunciar su discurso. Su incondicional homólogo australiano salió en su ayuda y lo acompañó hasta la salida correcta.