Traducido por La Haine
Preparación de largo plazo, recopilación cuidadosa de la información, discusiones secretas, desinformación operacional y el engaño del público - todo esto se halla detrás de la operación "plomo sólido” de las fuerzas de Israel a la Franja de Gaza, que comenzó la mañana del sábado.
Fuentes de defensa de alto nivel dijeron que el ministro de defensa Ehud Barak dio instrucciones las fuerzas de Israel para preparar la operación desde hace seis meses, incluso cuando Israel comenzaba a negociar un acuerdo de alto el fuego con Hamas. Según las fuentes, Barak mantuvo los preparativos; aun cuando el período de negociaciones permitiría que Hamas estructurara un arreglo de cuentas con Israel, el ejército israelí necesitaba tiempo para prepararse también Barak dio órdenes para realizar un amplio acopio de información de inteligencia, que intentó delinear la infraestructura de seguridad de Hamas, junto con la de otras organizaciones militantes que funcionan en la Franja.
Este esfuerzo de inteligencia proveyó información sobre bases permanentes, depósitos de armas, campos de entrenamiento, hogares de altos funcionarios y coordenadas de otras instalaciones civiles. El plan de acción implementado seguía siendo tan solo un proyecto hasta hace un mes, cuando se elevaron las tensiones después de que el ejército realizara una incursión en Gaza durante el alto el fuego para controlar un túnel que, según el alto mando, fue construido para facilitar un ataque de los militantes palestinos contra las tropas israelíes. El 19 de noviembre, el plan fue llevado para la aprobación final de Barak. El jueves pasado, 18 de diciembre, el primer ministro Ehud Olmert y el ministro de defensa se encontraron en la jefatura del ejército en el centro de Tel Aviv para aprobar la operación.
Sin embargo, decidieron esperar para ver si Hamas llevaría a cabo ataques tras la finalización del alto el fuego. Por lo tanto esperaron para llevar el plan a la aprobación del gabinete, aunque informaron al Ministro de Asuntos Exteriores Tzipi Livni de los progresos. Esa noche, hablando para los medios, fuentes de la oficina del primer ministro dijeron que “si los disparos desde Gaza continúan, el arreglo de cuentas con Hamas será inevitable.” El fin de semana, varios ministros del gabinete de Olmert protestaron ruidosamente contra él y contra Barak por no tomar represalias a los lanzamientos de cohetes Qassam de Hamas.
“Estas discusiones habrían hecho imposible Entebe o la guerra de seis días” dijo Barak en respuesta a las acusaciones. El gabinete fue convocado finalmente el miércoles, pero la oficina del primer ministro hizo un guiñó a los medios, diciendo que la discusión giraría alrededor de la Jihad global. Los ministros se enteraron recién esa mañana que la discusión era realmente sobre la operación en Gaza.
En su resumen para la discusión, la oficina del primer ministro dedicó una línea a la situación en Gaza, comparado con una página entera referida a proscribir 35 organizaciones islámicas.
Lo que ocurrió realmente en la reunión del gabinete fue una discusión de cinco horas sobre la operación, en la cual se informó a los ministros sobre los varios modelos y planes de acción. “Fue una revisión muy detallada,” dijo un ministro.
El ministro agregó: “Cada uno entendió cabalmente a qué tiempos nos dirigíamos y a qué clase de panoramas podría llevar esto. Nadie puede decir que no sabía sobre lo que estaba votando.” El ministro dijo también que en la discusión quedó claro que las conclusiones del comité de Winograd sobre el desempeño de los que tomaron decisiones durante la segunda guerra del Líbano de 2006 “fueron internalizadas por completo.”
Al final de la reunión, los ministros votaron unánimemente a favor del ataque, dejando a la decisión del primer ministro, el ministro de Defensa y el ministro de Asuntos Exteriores la elección del momento exacto. Mientras Barak resolvía los detalles finales con los oficiales responsables de la operación, Livni fue a El Cairo a informar al presidente de Egipto, Hosni Mubarak, que Israel había decidido atacar a Hamas.
Paralelamente, Israel continuó desinformando con el anuncio de que abriría la frontera de la Franja de Gaza y que Olmert decidiría si poner o no en marcha el ataque luego de otras tres reuniones el domingo - un día después de que la orden real para iniciar la operación fue expedida. “Hamas evacuó todo su personal de jefatura después de la reunión del gabinete el miércoles,” dijo un funcionario de defensa, “pero la organización mandó de vuelta a su gente en cuanto oyeron que todo se iba a decidir el domingo"
La decisión final fue tomada la mañana del viernes, cuando Barak se reunió con el general Gabi Ashkenazi, jefe del servicio de seguridad del Shin Bet y el jefe de la dirección de inteligencia militar, Amos Yadlin. Barak se reunió con Olmert y Livni varias horas más tarde para una discusión final, en la cual el trío dio sus órdenes a la fuerza aérea. Entre la noche de viernes y la mañana del sábado se informó a los líderes de oposición y a las figuras políticas prominentes sobre el inminente ataque, incluyendo el líder de Likud Benjamin Netanyahu, Yisrael Beuiteinu del Avigdor Liebermen, Haim Oron del Meretz y el presidente Shimon Peres, junto con el portavoz del parlamento Dalia Itzik.