Miles de universitarios, secundarios y profesores marcharon, pese a la lluvia y en medio del resguardo policial, por distintas calles de la capital chilena en una nueva jornada de movilización para exigir una educación pública, gratuita y de calidad en el país suramericano.
Medios locales, indicaron que a diferencia de otras marchas, las autoridades mantuvieron estrecha coordinación con los organizadores para evitar hechos de violencia.Sin embargo, se reportaron algunos disturbios con varios detenidos temprano en la mañana.
Algunas informaciones, aseveran que los manifestantes armaron cadenas humanas para aislar los violentos y prevenir nuevas revueltas.
Los organizadores de la marcha calcularon en 100 mil los convocados de la concentración en el centro de Santiago, aunque la prensa local dice que son unos 40 mil. Muchos de ellos se movilizaron con paraguas, bolsas de basura, chaquetas, gorros y bufandas para contrarrestar la lluvia y la nieve.
La marcha, según informaron también se extendió a otras ciudades. Los puntos con alto nivel de acatamiento fueron: Concepción, Valparaíso y Valdivia.
El recorrido partió desde la calle San Martín, a un costado del palacio presidencial de La Moneda (sede del Ejecutivo), y vanzó hacia el oeste. Las autoridades que fijaron la ruta, negaron el paso por otros lugares requeridos, lo que motivó en un principio el rechazo de la dirigencia estudiantil.
El movimiento estudiantil chileno, junto a los profesores, familiares y un amplio sector social exige que el Estado asuma los costos de la enseñanza pública. Para ello han incluso instado al gobierno a que habilite un plebicito, cuestión por ahora ha sido rechazada.
La Tercera / BioBio / Telesur
