Una flotilla compuesta por nueve embarcaciones y750 personas de 60 nacionalidades distintas que llevaba ayuda humanitaria a Gaza fue atacada hoy, 31 de mayo, por el ejército Israelí en aguas internacionales. Resultado de ello diecinueve activistas solidarios fueron asesinados, una treintena heridos y un número no precisado llevado a centros de detención.
La “flotilla de la libertad”, como así se denominaba, pretendía entregar alimentos, medicinas, materiales para la construcción, casas prefabricadas y más ayuda humanitaria a los habitantes de Gaza sobre la que el Estado sionista de Israel, desde hace tres años, tiene impuesto un fuerte bloqueo para doblegar al pueblo palestino que lucha por el derecho a la autodeterminación.
Este es otro de los tantos actos criminales cometidos por Israel que ahora pretende justificarlo como “respuesta a una agresión”. Según sus autoridades, cuando sus tropas desembarcaron en una de las embarcaciones fueron atacados con “fuego, cuchillos y palos”. Habrase visto mayor cinismo. Uno de los ejércitos más poderosos del mundo justifica su crimen porque lo atacaron con cuchillos y palos. ¿Y cómo justifican haber atacado a elementos civiles en aguas internacionales? ¿Su accionar responde a la lógica de la guerra preventiva utilizada por Bush?
Israel, que cumple el papel de gendarme de Medio Oriente, es el responsable del asesinato de cientos, miles de niños, jóvenes, mujeres, ancianos palestinos que luchan por el derecho a contar con una Patria. Hoy suma a su haber un nuevo acto criminal deplorable, que provoca el repudio en todo el mundo. Tal es el rechazo mundial a su conducta que la ONU en varias ocasiones ha condenado al Estado de Israel por actos de esta naturaleza, pero siempre con el voto en contra de los Estados Unidos. Ahora el imperialismo yanqui ha dicho “lamentar” el incidente, pero no lo condena. Y no lo hace porque Estados Unidos e Israel actúan juntos, se ayudan mutuamente, tienen intereses económicos y políticos similares.
Rechazamos este crimen y nos solidarizamos con los activistas integrantes de la “flotilla de la libertad” y reiteramos nuestro apoyo a la lucha del pueblo palestino en su lucha por conquistar una auténtica liberación nacional.
La “flotilla de la libertad”, como así se denominaba, pretendía entregar alimentos, medicinas, materiales para la construcción, casas prefabricadas y más ayuda humanitaria a los habitantes de Gaza sobre la que el Estado sionista de Israel, desde hace tres años, tiene impuesto un fuerte bloqueo para doblegar al pueblo palestino que lucha por el derecho a la autodeterminación.
Este es otro de los tantos actos criminales cometidos por Israel que ahora pretende justificarlo como “respuesta a una agresión”. Según sus autoridades, cuando sus tropas desembarcaron en una de las embarcaciones fueron atacados con “fuego, cuchillos y palos”. Habrase visto mayor cinismo. Uno de los ejércitos más poderosos del mundo justifica su crimen porque lo atacaron con cuchillos y palos. ¿Y cómo justifican haber atacado a elementos civiles en aguas internacionales? ¿Su accionar responde a la lógica de la guerra preventiva utilizada por Bush?
Israel, que cumple el papel de gendarme de Medio Oriente, es el responsable del asesinato de cientos, miles de niños, jóvenes, mujeres, ancianos palestinos que luchan por el derecho a contar con una Patria. Hoy suma a su haber un nuevo acto criminal deplorable, que provoca el repudio en todo el mundo. Tal es el rechazo mundial a su conducta que la ONU en varias ocasiones ha condenado al Estado de Israel por actos de esta naturaleza, pero siempre con el voto en contra de los Estados Unidos. Ahora el imperialismo yanqui ha dicho “lamentar” el incidente, pero no lo condena. Y no lo hace porque Estados Unidos e Israel actúan juntos, se ayudan mutuamente, tienen intereses económicos y políticos similares.
Rechazamos este crimen y nos solidarizamos con los activistas integrantes de la “flotilla de la libertad” y reiteramos nuestro apoyo a la lucha del pueblo palestino en su lucha por conquistar una auténtica liberación nacional.